Se expone actualmente en el Museo ICO Miguel Fisac y Alejandro de la Sota: miradas en paralelo. Dos maestros de la arquitectura española en su centenario, una exposición-homenaje que muestra algunas de las aportaciones más relevantes de estos arquitectos y lo hace a través de un atractivo recorrido dónde se entrecruzan obras, objetos, planteamientos e influencias.
Aunque se anticipa que nos vamos a encontrar con dos autores «con más diferencias que similitudes», las conexiones entre ambos resultan de gran interés para comprender la evolución de la arquitectura española del siglo pasado, más allá de sus circunstancias iniciales comunes: procedían de regiones periféricas y, tras compartir periodo de estudios en la Escuela de Madrid, decidieron permanecer en esa ciudad, dónde desarrollaron su trayectoria profesional.
Curiosamente, Sota y Fisac participaron de modo activo en el inicio del proceso de recuperación moderna en Galicia que tiene lugar una vez superada la Guerra Civil y la posterior autarquía. Con motivo del Año Santo Compostelano de 1954, los dos acuden invitados al Colegio Mayor la Estila de Santiago de Compostela, a impartir sendas conferencias que se convierten en las primeras aportaciones teóricas que se harán realidad en las décadas siguientes.
En su intervención, titulada «Santiago monumental y Santiago del futuro», Fisac atiende principalmente a los aspectos urbanísticos de la ciudad histórica, aunque también se percibe el interés por la búsqueda de una nueva arquitectura que forme parte de esa ciudad:
La arquitectura es algo eminentemente vivo. No podemos hacer arquitectura de guardarropía, pues en ella incide una serie muy compleja de elementos, que varían con las condiciones de vida de cada época y país. Hay que hacer una arquitectura a la medida del hombre y de sus necesidades actuales.
Alejandro de la Sota titula su intervención «La arquitectura y nosotros» y, desde la introducción, expresa el deseo de buscar una nueva arquitectura que deje atrás las ideas historicistas del período autárquico y, para ello, utiliza como ejemplo el edificio de la residencia de estudiantes, proyectado por Fisac en 1947:
Agradezco la invitación de La Estila para hablar en Santiago de Compostela, sintiendo no estar a la altura de los demás conferenciantes que honran estos cursos y de la propia Estila que empezó su buen camino en Santiago con este edificio que es síntesis de la arquitectura de aquí, casi ejemplo de lo que aquí debe hacerse, o más bien, ejemplo de lo que cuando La Estila se edificó debía hacerse. Hoy se ha andado mucho, y mucho ha andado su autor, Miguel Fisac, pero como precedente, La Estila es de la dignidad que a Santiago y a Fisac corresponde. Me honro hablando aquí, en esta sala de aspecto medieval, desde donde, como uno más de estos guerreros, usaremos de sus lanzas para tratar de vencer a tanto enemigo de la arquitectura, por la cual hoy, como siempre, trataré de romper alguna. España es hoy un país atrasado en arquitectura.
España era entonces un país atrasado en arquitectura: era preciso un nuevo rumbo, y la feliz coincidencia de los dos —entonces jóvenes— maestros en Santiago sirvió para comenzar el fructífero viaje que ellos mismos recorrerían.
Imagen: Alejandro de la Sota, Concurso para la Diputación Provincial de A Coruña (1954)